tag:blogger.com,1999:blog-313651952024-03-07T10:52:39.891-03:00yes.udmihttp://www.blogger.com/profile/11090228191851575461noreply@blogger.comBlogger61125tag:blogger.com,1999:blog-31365195.post-35676651051483906472011-04-22T21:25:00.000-03:002011-04-22T21:29:12.400-03:00love is real<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh6O-JupwZBAXeyfjaKruALXvg4Iyr0wTPiXIUJyz6haMiUvxAb4e8AmhqrBNq5M1Mi3qKSZXPKgfbbEaDlkx7nVWnhy6Im02E4I8hJSWxLRZSSfyPPeOEZWzYxp88J5avT-TpQ/s1600/DSCN3980.jpg"><img style="margin: 0px auto 10px; display: block; text-align: center; cursor: pointer; width: 320px; height: 240px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh6O-JupwZBAXeyfjaKruALXvg4Iyr0wTPiXIUJyz6haMiUvxAb4e8AmhqrBNq5M1Mi3qKSZXPKgfbbEaDlkx7nVWnhy6Im02E4I8hJSWxLRZSSfyPPeOEZWzYxp88J5avT-TpQ/s320/DSCN3980.jpg" alt="" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5598569419974827826" border="0" /></a><span style="font-size:78%;">love is you.<br /></span>udmihttp://www.blogger.com/profile/11090228191851575461noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-31365195.post-19984766991588917972009-10-31T14:46:00.000-03:002009-10-31T14:47:03.659-03:00AlteridadEn el barrio lo conocían como “Cuca”, hijo de “la Chiquita” y hermano de “la Batuca”. Vivían ellos tres solos en una pequeña casa al final de un largo pasillo, que según cuentan las malas lenguas, estaba invadida por ratas y cucarachas. Pero a ellos no les importaba, jamás habían conocido el lujo, ni siquiera por la tv (ya que no tenían). Dos perros ovejeros manto-negros, de los que usa la policía, eran sus mascotas.<br />Tampoco tenían teléfono (tal vez alguien en Entel había extraviado su pedido de línea y con la privatización, la vida de esta familia, y la de tantas otras, pasó a no importarle a nadie), es por eso que cada tanto venían a mi casa a llamar a el ex marido de la Chiquita, que tenía una nueva familia.<br />En las tardes de verano, los chicos de la cuadra nos juntábamos bajo los pocos arboles que quedaban, y nos poníamos a contar historias sobre ellos. Historias que jurábamos ciertas, pero que un oído maduro jamás podría considerar como tal.<br />Los grandes también se contaban historias sobre ellos, pero como estaban más versados en el arte de la mentira, la mayoría pasaban por hechos reales.<br />Los chicos fuimos creciendo y ya no pasábamos tanto tiempo en la calle. Y los grandes tampoco. La inseguridad nos confinaba a nuestros hogares. De a poco todos nos fuimos olvidando de nuestros singulares vecinos.<br />Pero para ellos el tiempo no pasaba. El menemismo y la venta del país al más conveniente postor, el caso María Soledad y el caso Cabezas, el atentado en la AMIA y el cambio de milenio parecían no afectarlos. Se encontraban por fuera de este tiempo marcado por relojes. Envejecían, sí, pero solo físicamente.<br />En el dos mil uno estábamos todos muy preocupados por nuestros ahorros, cuando nos enteramos de que la Chiquita había muerto. ¿La causa?, nadie sabe. Simplemente por acumulación de años en su espalda encorvada. El Cuca y la Batuca quedaron a la deriva. Solos en este mundo hostil para gente como ellos.<br />Al poco tiempo supimos que la Batuca había conseguido trabajo en la fábrica de jugos Cepita. La vimos cada vez menos, tal vez hacía horas extras. Pero el Cuca pasaba casi todo el tiempo en la calle. El quiosquero era la principal victima de sus limosneos: tres cigarrillos por día. Su caminar era cada vez mas pesado, como si le costara levantar los pies del piso, y una vez que lo lograba, los hacía caer con tal fuerza que chocaban contra las baldosas haciendo demasiado eco.<br />Llevaba su boca siempre abierta, con la lengua hinchada y casi colgando (mi papá suponía que estaban probando nuevos medicamentos en él). Y con el transcurso del tiempo, las palabras que de ella fluían al exterior, resultaban cada vez más confusas.<br />Sus ojos se fijaban solamente en el cielo, como si con ellos pudiera penetrar las nubes y la atmosfera. Como si hubiese descubierto alguna verdad allí que no le permitía salir de su asombro, ni dejar de contemplarla. Tal vez estábamos todos demasiados ocupados en los problemas mundanos, que al fin de cuentas resultan triviales.<br />En los años que siguieron, se sucedieron alternadas internaciones del Cuca y la Batuca en diferentes nosocomios. Pero siempre salían y volvían al barrio en peor estado. Mas desentendidos de la realidad y con mas marcas en sus pieles.<br />Ya casi ni salían de su casa. El mecánico de la cuadra se encargo de llevarles provisiones y de administrar sus cuentas. Solo a través de él es que sabíamos como vivían. También nos enteramos de que su padre había muerto: habían quedado huérfanos.<br />Luis, el mecánico, le contó a mi mamá que el Cuca salía todas las noches, alrededor de las tres de la mañana, se paraba en la mitad de la calle, y extendía sus brazos al cielo, agitándolos con frenéticos movimientos. Después de un par de noches de hacerlo entrar, decidió cambiarles la cerradura de la casa, para poder controlar que no salieran. Pero esto no constituía un impedimento para el Cuca, ya que debido a los medicamentos que recibía, acumulaba tal fuerza en su cuerpo que podía romper casi cualquier cosa con sus manos. Siete cerraduras cedieron entre sus dedos.<br />Yo, que desde chica sufro insomnio, sabía que a las tres de la mañana, mientras todos duermen, pasan cosas raras y la percepción parece agudizarse. Por eso cuando mi madre me contó lo que hacía el Cuca a esa hora, supe que tenía que verlo.<br />Elegí un miércoles para quedarme al lado de mi ventana esperando su actuación. Exactamente a las dos y cincuenta y nueve minutos lo vi salir de su casa. Llevaba un pijama y se encontraba descalzo, como si hubiese salido corriendo de su cama, sin importarle los tres grados bajo cero que hacían, según TN Noticias.<br />Parecía estar en trance. Se movía lentamente y sus ojos miraban como siempre al cielo, pero esta vez parecía buscar allí algo en particular.<br />Cuando llegó a la exacta mitad de la calle, levantó bruscamente sus brazos hacía ese cielo repleto de estrellas y vacío de nubes. Su cuerpo se encontraba completamente recto, sus piernas pegadas una a la otra, sus manos completamente estiradas, con las puntas de los dedos apuntando hacía arriba, y su cabeza mirando al negro firmamento que se extendía sobre él.<br />Se quedó así, inmóvil, por unos minutos, hasta que con sus dedos comenzó a trazar círculos imaginarios, cada vez mas amplios. Sus brazos empezaron a moverse para poder extender el radio de las circunferencias. Sus piernas temblaban y sus ojos se sacudían en todas las direcciones. Todos sus músculos parecían moverse, guiados por una música imperceptible para mis oídos.<br />Diez minutos duró esta danza. Sus brazos descendieron precipitadamente, sus piernas y su espalda se aflojaron y cayó al piso con los ojos cerrados.<br />Esperé unos instantes para ver si se levantaba: no pasó nada. Se quedo allí.<br />Llamé a mis padres, que a la vez llamaron a los vecinos de al lado, que a la vez llamaron a otros vecinos y todos salimos de nuestras casas a ver que le pasaba al Cuca y por que no se levantaba del frío asfalto.<br />Según un vecino médico, había muerto. Jamás se supo de que. Su corazón funcionaba bien y no tenía ninguna enfermedad. Pero yo había sido testigo de su ida de este mundo y podría jurar que él no murió, solamente no está mas entre nosotros y entre nuestros frívolos problemas.udmihttp://www.blogger.com/profile/11090228191851575461noreply@blogger.com5tag:blogger.com,1999:blog-31365195.post-75401634136654717332009-06-27T17:19:00.004-03:002009-06-27T17:21:20.156-03:00Ficción: la antesala de la iluminación<i>(Ensayo final de la materia Taller de Expresión I de la carrera Ciencias de la Comunicación, U.B.A)</i><br /><br />En el ardid de la creación, nuestra imaginación se encauza hacia diferentes rumbos, siendo pocas las veces en que podemos determinarlos. ¿Qué es entonces, si no somos nosotros mismos en un acto plenamente consciente, lo que determina el vuelo de nuestra mente a la hora de crear ficción?. Entre un sinfín de temas para escribir, ¿qué es lo que nos mueve a elegir uno?.<br />Nos entrenamos en el arte de crear ficción desde que somos infantes, pero conjuntamente aumentamos nuestro acervo de relatos, tramas de películas, historias que nos cuentan los mayores. Vivimos rodeados de ficción, ya sea cuando miramos la televisión, cuando escuchamos letras de canciones, o simplemente cuando nos describimos a nosotros. Si, estamos constituidos por ficciones, pequeñas, pero ficciones al fin. Como dice Bruner: “creamos nuestros relatos que definen el yo para hacer frente a situaciones en las que seguiremos viviendo”, es decir que nuestra vida esta ordenada por relatos sobre uno mismo, sobre nuestra familia y sobre nuestra comunidad, que van otorgando cohesión y sentido a nuestra identidad. Muchas veces al pasar el tiempo, nos damos cuenta de que parte de esos relatos contenían elementos ficcionales. Por ejemplo, uno en el colegio es enseñado que San Martin en un acto cargado de valentía, cruzó los Andes en un caballo blanco, y al pasar los años nos vamos enterando de que la realidad no fue tan así: cruzó los Andes, si, pero en lugar de caballo blanco hubo en la primera mitad un burro y en la segunda una camilla. Y esto sucede en todas las esferas de la vida. La ficción se mete por todas las hendiduras de la existencia, hasta en la misma cotidianeidad. Cuando contamos chismes muchos de ellos son totalmente o en parte inventados, o cuando decimos mentiras o excusas, la ficción esta siempre presente, dando vueltas por todos lados, haciendo ruido, como un mosquito en la oscuridad zumbando en nuestros oídos.<br />Como dice el autor de El Concepto de Ficción, la verdad no es necesariamente lo contrario de la ficción.<br />Según Bajtin el discurso de una persona se erige en base a un dialogo con otros discursos, es decir, que todas esas tramas y relatos que hemos leído, visto o escuchado en nuestras vidas (junto con las relaciones intersubjetivas que mantenemos, claro), ejercen una influencia en la conformación de nuestra identidad. Se podría pensar entonces que la ficción es un bloque (o varios) de nuestra persona, y que nuestro hacer, decir y escribir están íntegramente relacionados con nuestro “acervo ficcional”.<br />Tal vez ese acervo, además, nos oriente la mirada, de la que habla Gloria Pampillo, hacia determinados lugares situaciones y personajes. Funcionaria como una guía.<br />Cortázar escribe que los temas de la mayoría de sus cuentos no fueron elegidos por un acto consciente, sino que le fueron como impuestos por una fuerza ajena, convirtiéndose él en un médium. El caso de este escritor podría ser el extremo de lo que trato de exponer aquí, ya que él ni siquiera determina su mirada hacia algún lugar, sino que el tema del cuento viene por sí mismo. Pero es sabido que otros escritores, como Borges, buscan las raíces de sus cuentos en historias verídicas (en Turdera en este caso), eligiendo de toda la realidad que los circunda un tema particular, aquello que atrapó su atención. Que resonó, como particular diapasón, con notas inscriptas en el pentagrama de su historia. Un ejemplo de esto podría ser cuando un hombre llamado Cabrera le pide a Pampillo que escriba sobre un tren cuyos vagones representan cada uno a un pecado capital, resultándole a la escritora un historia que no le despertaba el entusiasmo necesario para escribirlo, pero si le parecía interesante escribir sobre la relación de Cabrera con su silla a la cual acariciaba de una manera particular (casi erótica).<br />Esta autora dice también que los temas resultan significativos para una persona porque han vuelto una y otra vez a la memoria. Con respecto a esto, Bajtin expone que los discursos son enunciados de manera abierta al tiempo, esperando una respuesta en el futuro, una resurrección. ¿Se podría afirmar entonces que esos discursos que hemos recibido quedan boyando por nuestro inconsciente hasta que son retomados y en este caso escritos (ya sea en forma de cuento o novela) con ciertos elementos ficcionales?. Si es así, podríamos inferir que la ficción sirve para ordenar nuestro inconsciente y para conocerlo. Entonces las “fuerzas ajenas” que mueven a Cortázar a escribir un cuento son su propio inconsciente que retuvo ciertos hechos y necesitó escribirlos para iluminarlos con las luces de la vigilia, con todo lo que la conciencia trae aparejado.<br />Sería interesante preguntarnos acerca de aquellos autores que dicen que comienzan a escribir sin un rumbo fijo, o que los protagonistas de sus cuentos terminan haciendo cosas que ellos no pretendían que hicieran, ¿que sería lo que en este caso lleva a la escritura a cierto camino?, ¿podríamos relacionar esto con la técnica psicoanalítica de asociación libre?. Jack Kerouac escribía mediante dicha técnica, a la que él llamaba “prosa espontanea”, pero en este autor la escritura “inconsciente” era intencionada.<br />La ficción nos ayudaría entonces a conocernos y a conocer el mundo que nos rodea y en el cual estamos sumergidos. Sería la antesala de la iluminación. Encierra en sí un extraordinario poder, que como tal puede ser usado para cambiar el mundo (y uno mismo) o para perpetuarlo.udmihttp://www.blogger.com/profile/11090228191851575461noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-31365195.post-24593920423924836392009-05-04T16:57:00.001-03:002009-05-04T17:11:19.218-03:00oh! darlingSe lo había propuesto, y si bien casi nunca cumplía con las metas que se imponía, esta la tenía que cumplir. No se trataba solamente de ella. Podríamos decir que era una cuestión de género. Se había cansado de tener que leer quejas de chicas que escribían a las revistas sobre el mismo tópico una y otra vez, y de tener que escuchar a sus amigas contar casi las mismas historias. Ella también lo había vivido, claro, porque aunque no era como la mayoría de las mujeres, en estos asuntos no se salvaba de tener que sufrir las penurias por las que pasaban las demás. Muchas se consolaban diciendo “el amor duele”, pero ella no veía porque tenía que ser así.<br />Lola sabía como comportarse para agradar (y mas que eso) a los hombres, sabía moverse y sonreír, era conocedora de los gustos del sexo opuesto y tenía el poder de saber los intereses de un muchacho con tan solo mirarlo. Sus respuestas siempre eran ingeniosas, sus besos siempre húmedos y su pelo olía a goma de mascar de tutifruti.<br />Unos pocos meses atrás había terminado su relación con el único hombre al que dejó realmente entrar a su vida, y como todas las historias de sus amigas y conocidas, terminó por culpa de las necesidades de él de flirtear. Lola se había entregado totalmente, le había contado sus secretos más ocultos, le mostró las partes más oscuras de su alma (su esencia). Y aunque en sus planes jamás había entrado la idea de casarse y tener hijos, por él lo hubiera hecho.<br />Ya tenía decidido quien sería su primera victima. Lola conocía la debilidad de Juan Pedro hacia ella y también conocía a muchas chicas a quienes él había lastimado. Se juró no dejarse influenciar por la pena y esos sentimientos demasiados humanos que nos doblegan a la hora de impartir justicia (pero una justicia verdadera, no la que se decide con jueces y abogados mediante).<br />Se las arregló para encontrárselo casi a diario, haciéndole creer que el destino los estaba intentando unir. No había pasado más de una semana cuando él la invito a cenar. La pasó a buscar por su casa y fueron al restaurant preferido de ella (mera casualidad). La cena estuvo bien, pero a Lola la aburría. Era contador, trabajaba de lunes a viernes en una oficina en plena city porteña y los fines de semana iba a su casa en un country en Pilar. Todo demasiado previsible, demasiado estándar, demasiado gris. Solo hablaba de los clientes y del campeonato de futbol inter-country. Nada de cine, ni de música, ni de filosofía. Lola no entendía como tantas mujeres lo habían deseado.<br /> La llevó de regreso a su casa y al despedirse ella lo besó. Suspiró como si estuviera enamorada y lo miró intensamente. Sabía que había caído, que la estaba mirando entrar, pero no se dio vuelta a comprobar.<br /> Al día siguiente la llamó y le comentó lo bien que había pasado la velada anterior y que le gustaría repetirla pero ahora en casa de él. Lola accedió a la invitación.<br />Su departamento en la ciudad estaba decorado como lo estaban todos los de los solteros que ella había visitado. Podía recorrerlo con los ojos cerrados sabiendo donde esquivar una mesita o un sillón. Podía saber que había en la heladera sin abrirla.<br />Comieron pastas y mantuvieron la misma y aburrida charla que el día anterior. Lola fingía. Tuvieron sexo. Lola continuaba fingiendo. No se quedó a dormir. Nunca lo hacía.<br />Continuaron viéndose durante unas semanas. Cada salida parecía salida de una matriz. Eran todas idénticas. Incluso el sexo.<br /> Una tarde mientras Lola estaba en el trabajo, recibió un mensaje de él que decía: “tengo que decirte algo importante. No puedo esperar”. Sabía que le diría eso. Había llegado el día en que todas esas insulsas salidas cobrarían significado. La citó cerca de su oficina.<br />Cuando entró al café lo vio que estaba hablando solo, las manos le temblaban y su cara lucía un tono más pálido que el de costumbre. La armadura de Lola se desvaneció, pese a sus intentos de mantenerla intacta, de hierro. Recordó todas las veces en que ella fue la victima. La poca misericordia con que sus sentimientos habían sido tirados por el fango y la frase que se repetía una y otra vez “vos sos una chica para estar de novio y yo ahora quiero joder”. ¡Cómo si ella no quisiera lo mismo!. Todas las veces que la redujeron a un alma sencilla, a un espíritu chato y previsible. ¿Sería capaz de hacerle lo mismo a este pobre pelmazo?. Después de todo eso era lo que era, y no fingía como los demás que la habían conquistado. No podía estar con él, pero tampoco podía lastimarlo. El ya era su propia victima.udmihttp://www.blogger.com/profile/11090228191851575461noreply@blogger.com6tag:blogger.com,1999:blog-31365195.post-84375994979935111132009-04-03T19:59:00.002-03:002009-04-03T20:10:32.216-03:00blue, man city blue<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgEhDkdNkLd8GMvDIZTTeaW9xNRhogTzigkYLplFoXJlEvCfEOvb26lywY-qT8CN95alRjZvBj1uwqNoejeK22IWn2RI8fMXrNSwDtCDxOC65nU6HC1MwgOkdlGU0K7Twq72MwQ/s1600-h/DSCN1085.jpg"><img src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgEhDkdNkLd8GMvDIZTTeaW9xNRhogTzigkYLplFoXJlEvCfEOvb26lywY-qT8CN95alRjZvBj1uwqNoejeK22IWn2RI8fMXrNSwDtCDxOC65nU6HC1MwgOkdlGU0K7Twq72MwQ/s320/DSCN1085.jpg" border="0" alt="" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5320605429968347122" /><br /></a>¿Cómo retratarte?. Diría que es casi imposible abarcar toda tu angustia, tu locura, tu desamor. Debo hacerlo, de todas maneras, porque aunque la mayoría te recorra, nadie capta la exquisitez de tus detalles, de tus curvas, de tus contrastes. Es como la gente que fuma por vicio, que pierden lo que es el amor por fumar, por saborear cada hebra de tabaco. Tal vez sea eso, lo que hace que no se detengan a mirarte, a contemplar tus constantes cambios: la costumbre. Yo que solo te cruzo de vez en cuando, siento celos de aquellos que te poseen día a día. Pero no tiene porque ser así. Tenemos una relación mas sincera, sabemos de la necesidad de la distancia. Nos encontramos cuando realmente queremos encontrarnos. Y no es que crea en el destino, pero –permitime usar estas palabras inglesas-<i> we are meant to be</i>. Nos reflejamos la una en la otra. Casi siempre nos encontramos en el mismo estado de humor, y en los casos en que no, logras cambiar el mío. Se que en unos años serás toda mía y seguramente deje de prestarte atención, pero ahora me haces bien.udmihttp://www.blogger.com/profile/11090228191851575461noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-31365195.post-42092101743796635512009-03-30T01:26:00.000-03:002009-03-30T01:29:08.604-03:00interzoneCasi siempre estoy no disponible, pero a veces… a veces me agarran ataques de ausentismo, porque aunque estás mas presente que cuando es no disponible (escuchas los “plin” de los demás), creas más misterio. Estás pero no. No disponible es que estás pero que te haces el importante. Es un estado muy de vedette trucha, o de rockstar sin rock. Pero no escuchas nada, y eso es lo que me gusta.<br />El ausente te permite no contestar, porque podes argüir que no estabas, que realmente sos importante y tenés una vida (sí, claro). Si no estás disponible la gente igualmente cree tener el derecho a hablarte y a esperar respuesta, como si les pertenecieras, como si tuvieras un pasivo con ellos que saldas con tus medidas palabras. El no disponible pone en evidencia el grado de egocentrismo de las personas: <i>yo soy muy importante como para rebajarme a leer las estupideces de mis contactos/ yo soy muy importante como para que no me prestes atención</i>. En cambio el ausente es como ese chico que enamora porque parece ocultar algo (aunque después te enteres de que ese algo no existía, que el pibito es un retardado social). El ausente es estar ensimismado, es estar con uno y nadie mas (aunque aceptaríamos que algunas, pocas, personas iniciaran contacto con uno), es como estar en la playa escuchando el cd que mas te emociona, como comer muchos caramelos previamente separados por color, como escribir esto que estoy escribiendo. Pero siempre hay un “plin”, una causa que te desvía, que te distrae <i>(nobody ever mentions the weather can break or make your day)</i>. Un factor x no esperado, no calculado, pero que sabías que podía pasar. Por que claro, vos siempre tenés la culpa, ¿qué te pensabas que eras perfecta?. ¡Qué ingenua!.udmihttp://www.blogger.com/profile/11090228191851575461noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-31365195.post-27229042784642422852009-02-17T19:41:00.002-02:002009-02-17T19:50:19.330-02:00<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgUKUe6ldpGSRNwoZjTSYZM7X7KBwEYL9jbF0C3JEwJioURf00EOUrDZTPAovhzyBypHoo-qZijo65sM5dcAkdSuf_4Eq4h_WrLCfLyn7CFtUdDblx78yD-95YO54Td5ZRsi5Lo/s1600-h/DSCN0661.jpg"><img src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgUKUe6ldpGSRNwoZjTSYZM7X7KBwEYL9jbF0C3JEwJioURf00EOUrDZTPAovhzyBypHoo-qZijo65sM5dcAkdSuf_4Eq4h_WrLCfLyn7CFtUdDblx78yD-95YO54Td5ZRsi5Lo/s320/DSCN0661.jpg" border="0" alt="" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5303886209280008706" /><br /></a><span> <span style="font-size:78%;">-mickey mouse time-</span></span>udmihttp://www.blogger.com/profile/11090228191851575461noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-31365195.post-23990022584151742612009-01-20T01:33:00.002-02:002009-01-20T01:50:20.673-02:00<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhdFHvvlfVakJHZ3u7eUGeiPES-QHRKIj3tb4ekVAEufCJJUf27ZVAq5iAy-oTwYS2Gky28SakXO4M8iJh1hCrqU2h7UF_rhdvvS3xQVSrXT35QhgxGZaIzolBQgaO0XRXcxgHD/s1600-h/vacaciones+09+250.jpg"><img src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhdFHvvlfVakJHZ3u7eUGeiPES-QHRKIj3tb4ekVAEufCJJUf27ZVAq5iAy-oTwYS2Gky28SakXO4M8iJh1hCrqU2h7UF_rhdvvS3xQVSrXT35QhgxGZaIzolBQgaO0XRXcxgHD/s320/vacaciones+09+250.jpg" border="0" alt="" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5293214319110451826" /><br /></a><span style="font-size:78%;"><span>todo lo que quedaba se desvaneció<br />-anxiously-<br /></span><br /></span>udmihttp://www.blogger.com/profile/11090228191851575461noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-31365195.post-10640678705806924282008-12-27T19:52:00.004-02:002008-12-27T19:58:04.156-02:00Love will tear us apart<blockquote><span style="font-style:italic;">I tried to get to you<br />you treat me like this<br />(Ian Curtis)</span><br /></blockquote><br />Fui apuñalada.<br /> Me encontraba cocinando luego de un largo día en la oficina. Melina vendría a las doce y tendríamos una “noche de chicas”, como nos gustaba llamar a esas noches en que mirábamos películas románticas, comíamos golosinas y hablábamos de hombres. <br />Preparaba pasta, ya que como era viernes podía darme el lujo de cocinar. La rutina solo me permitía comida descongelada o delivery. Además, los capelettis con salsa a los cuatro quesos eran mi comida preferida.<br />Mientras cortaba cubos de queso, mentalmente hacía una lista de todas las cosas que le tenía que contar a Melina. Él encabezaba el inventario. Nos había presentado una amiga en común y nos sentimos atraídos desde que nuestras vistas se cruzaron por primera vez. Él no me lo dijo, pero yo lo podía intuir. Nunca había conocido a una persona tan misteriosa. <br />Amaba bailar música electrónica. Supongo que esa era su manera de liberar las tensiones que había acumulado sobre su espalda durante la semana. ¡Se veía tan sexy cuando su cuerpo se dejaba guiar por las bases del drum ’n’ bass!. <br />Otra de sus pasiones era hablar sobre marxismo. Él solía decir que podía olvidarse de todo mientras mantenía discusiones sobre materialismo histórico. Era la persona más especial que había conocido en toda mi existencia. Naturalmente estaba fascinada por él.<br />En varias ocasiones y en varias fiestas, nuestros nerviosos labios se habían encontrado. Así también nuestras complicadas mentes. Pasábamos noches enteras chateando. Hablábamos de nuestras vidas, y en particular sobre nuestros problemas psicológicos. Se expresaba de una manera muy cerrada. Me encantaba intentar descifrarlo. Pero sabía que podía enamorarme de él, y eso me aterraba. <br />Melina me decía que dejara fluir las cosas, que nada estaba predicho y que mi situación pasada no determinaba nada. Hacía poco que había terminado mi primer noviazgo real, es decir, de más de un mes y con presentación de padres. Estaba frustrada con respecto al amor. O mejor dicho, escéptica. <br />Pero era viernes y no iba a ahogarme en mis absurdos y no conducentes pensamientos. <br />Puse New Order en el equipo de música y mientras esperaba el hervor del agua, cerré los ojos y deje que mi cuerpo se liberara con la música de los ex Joy Division. Pensé en el pobre de Ian Curtis, que cuando conoció al amor su mente no lo dejó disfrutar. Y en su trágico final, con sus pies meciéndose en el aire, mientras perdía veintiún gramos. <br />Prendí el primer porro. Necesitaba de medidas drásticas si quería darles asueto a mis pensamientos. Ninguna tormenta mental iba a arruinar esa noche. Ni el fin de semana.<br />Me puse el vestido negro con lunares blancos que había comprado en el Ejército de Salvación. Maquille mi rostro como lo hacía cuando salía (ojos delineados arriba del parpado, mejillas rosas y labios rojos). No había motivos por los cuales arreglarme tanto, pero mientras lo hacía se sentía bien.<br />El agua ebulleció y metí los capelettis. Puse a calentar la salsa y fui al living a seguir bailando y fumando.<br />Sonó el timbre. Miré el reloj y eran recién las diez. Melina jamás llegaba temprano y tampoco a horario. Contesté el portero y una voz me dijo desde el otro lado: “hola nena, necesito hablar con vos”. Era él. Por mi espalda corrió un escalofrío. Yo nunca le abría las puertas a nadie, pero era él, el de los labios conflictivos e ideas confusas. Agradecí haber fumado.<br />Lo hice entrar. Tardó años en llegar a mi departamento.<br />Nos saludamos con un abrazo fuerte, de los que cuesta despegarse. Estaba muy lindo, pero en algo había cambiado, aunque no podía deducir en qué. Nos sentamos en el sillón y me preguntó que estaba haciendo, lo cual era una pregunta bastante sencilla para haber sido producto de su mente. Tal vez él también había estado fumando. Le conté que estaba cocinando (lo invité a cenar) y que a las doce vendría Melina. Sus cejas se fruncieron y consternadamente miró al piso.<br />La habitación quedó en silencio. Sus ojos empezaron a recorrer mi cuerpo de una forma extraña, pero sensual a la vez. Tomándome en sus brazos, me besó. Me sentía bien, aunque un poco insegura ante su determinación. Nunca había actuado tan impulsivamente.<br />Estaba pasando. El pasado iba quedando mas lejos y el ahora, aunque impredecible, se tornaba excitante. Solo sentía y me dejaba llevar. ¿Pero llevar a dónde?.<br />Mi mano se deslizó dentro de su remera. Creyendo percibir algo extraño, la retiré vertiginosamente. Invadida por la curiosidad, volví a escurrir mis dedos entre su ropa, topándome con una estridente frialdad.<br />Me miró y sonrió perversamente.<br />Comenzó a acariciar mi rostro, mientras el cantante de New Order coreaba “love will tear us apart”. Me besó y sentí como la frialdad que había sentido antes en él, iba atravesando lentamente primero mi ropa y luego mi piel. Y otra vez. Y otra vez.<br />No podía gritar. Ni siquiera sé si realmente quería hacerlo. Eran todas mis relaciones amorosas repitiéndose, siendo plasmadas en ese instante. Ese instante que bien las representó a todas. Siempre creí que el amor me iba a salvar, que era lo esencial en esta vida terrenal. Lo que me había guiado en toda mi vida, esa constante búsqueda me resultaba tan estúpida ahora. Mi vida entera me resultaba estúpida. Veinte años dedicados casi exclusivamente al amor. ¡Que ingenua!.<br />Me arrastró hasta la cocina y me sirvió un plato de comida. Se sirvió para él también y sentado a mi lado, se dispuso a comer. De a ratos me besaba con una pasión que jamás había conocido. La sangre no paraba de salir.<br />Terminó de cenar, se levantó, me besó por última vez y se fue.<br />Ya hacen varios minutos desde que mi cuerpo dejó de responder a mi voluntad. No puedo moverme. Intento adivinar que hora es: tengo que aguantar hasta las doce.<br /> Siento como las últimas gotas de sangre se escapan de mi cuerpo.<br />Lo había dejado entrar. Me había dejado llevar. Había silenciado mis pensamientos. Creía que todo se aclaraba a mis ojos, pero ahora veo que todo cae: ¿tengo que aguantar hasta las doce?.udmihttp://www.blogger.com/profile/11090228191851575461noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-31365195.post-15757245127336042082008-12-21T19:52:00.005-02:002008-12-21T22:45:37.146-02:00personas de veranoA dice:<br />falta poco para tu cumple<br />A dice:<br />te da alegra o te da igual<br />L dice:<br />me da alegria por el lado de que es como cerrar una etapa<br />L dice:<br />y comenzar con la -------atucomplacienteysuficiente<br />L dice:<br />pero por otro lado me jode ingresar en los 20 y tantos<br />A dice:<br />y si<br />A dice:<br />te llamo ese dia y te tiro las orejas a distancia<br />A dice:<br />yo espero para es entonces haber hecho algun progreso , cambio, o algo<br />A dice:<br />si no es la personalidad, al menos que este mas bronceada jajajaja<br />A dice:<br />voy a aumentar las actitudes de persona de verano <br />L dice:<br />jajajajajajajajajajaja<br />L dice:<br />claro<br />L dice:<br />es que esa es la idea<br />L dice:<br />porque la persona de verano no piensa, y es superficial, por lo tanto un poco autosuficiente<br />A dice:<br />tampoco tanto, necesita del espejo<br />A dice:<br />y de la aprobacion del resto de la gente<br />A dice:<br />muchas personas de verano son personas de invierno encubiertas<br />A dice:<br />o viceversa <br />L dice:<br />si , eso seguro<br />L dice:<br />eee que bien, captaste la idea de persona de verano a la perfeccion aunque apenas te la expliqe <br />L dice:<br />creo que el ejemplo qe te di fue contundente<br />L dice:<br />jajaja<br />A dice:<br />no seas tan mala con T<br />A dice:<br />aunque tenga mail de persona de verano<br />A dice:<br />estudia carrera de persona de invierno/otoño<br />L dice:<br />va a tea<br />L dice:<br />y creo que ----- es la unica materia qe estaba haciendo de nuestra carrera<br />A dice:<br />ah, tanto no se de la vida<br />L dice:<br />yo porqe soy chusma<br />L dice:<br />jajaja<br />A dice:<br />jajajaa y de donde sacaste eso?<br />A dice:<br />ya se, fue G<br />L dice:<br />me lo conto S, que viajaba con ellas y escuchaba siempre lo que hablaban<br />L dice:<br />se quejaban de que los hombres las quieren solo para tener sexo<br />A dice:<br />nada nuevo bajo las nubes<br />A dice:<br />tarde o temprano siempre nos pasa<br />A dice:<br />mas temprano que tarde<br />L dice:<br />ojala me quisieran solo para sexo, al menos un rato<br />A dice:<br />OJALA<br />L dice:<br />siempre es "vos no sos una chica para boludear y yo ahora quiero joder"<br />L dice:<br />grrr<br />A dice:<br />"pero yo tambien quiero joder. jodamos juntos"<br />A dice:<br />jajajajajajaaja<br />L dice:<br />exacto<br />L dice:<br />ajajajajaudmihttp://www.blogger.com/profile/11090228191851575461noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-31365195.post-66272876317648087282008-11-20T00:27:00.000-02:002008-11-20T00:28:45.417-02:00...y de nuevo: la vida circular.udmihttp://www.blogger.com/profile/11090228191851575461noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-31365195.post-62652606727258260982008-11-12T19:38:00.000-02:002008-11-12T19:39:06.014-02:00Little BoyMi nombre es Paul. Paul Tibbets para ser mas preciso. Coronel de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos de Norteamérica. Mi papá siempre quiso que fuera militar, mi mamá soñaba con tener un hijo médico, pero con el magro sueldo que recibía mi padre no teníamos dinero para que fuera a la universidad. La única opción que parecía posible era alistarme en la Fuerza Aérea. Y así lo hice en el año treinta y siete, entre lágrimas y felicitaciones de mis padres.<br />No me costó acostumbrarme a la vida dentro del ejercito, era casi como la vida que llevaba en casa (una madre muy estricta, dirían algunos), salvo las largas y extenuantes jornadas de ejercicios. Lo único que me molestaba era estar lejos de mamá, porque a pesar de ser varón yo era muy unido a ella. Compartíamos muchas cosas, disfrutábamos mucho bailar acompañados de la voz de Ella Fitzgerald (que era nuestra favorita, aunque a mamá la hiciera llorar a veces); tomábamos largos baños con espuma, íbamos juntos a hacer las compras, escuchábamos programas de radio y adorábamos cocinar juntos. Pocos pueden decir que su madre es su mejor amiga, y yo tenía el orgullo de decirlo.<br />Durante la campaña en Alemania nos mandábamos cartas una vez a la semana al menos. Ella me contaba de sus peleas con papá, lo que se comentaba en los programas de radio sobre la guerra, y como se las arreglaba sin mi. Siempre terminaba las cartas de la misma manera “te extraño Paul, no hay noche que no deje de soñar contigo”. Lo cierto es que yo también soñaba todas las noches con ella, con nuestros bailes en la sala de estar, con las salidas que hacíamos al cine, con nuestras noches en la tina cuando papá se iba a jugar póker, pero lo que me quedaba resonando en la cabeza todo el día era su sonrisa: la forma en que sus labios se extendían y las comisuras se hundían en sus preciosas mejillas rosadas, los dientes blancos como perlas que apenas se asomaban entre esas carnosas líneas color carmín, y la manera en que sus ojos se achicaban y se llenaban de brillo. Mi madre era una mujer bellísima.<br />Durante la campaña de bombardeos en el frente nazi fui ascendido de rango y mamá se mostró más orgullosa de mí de lo que estaba habitualmente. Mis superiores comenzaron a mirarme con otros ojos, muchos de ellos decían que yo era la promesa de la Fuerza Aérea Norteamericana, que si todos los chicos fueran como yo la guerra la hubiésemos ganado en tan solo un mes. Como premio de esa excelente campaña me enviaron a casa. Iba a ver a mamá de nuevo. Tenía tanas ganas de abrazarla y de contarle todas mis hazañas.<br />En América me recibieron como a un héroe. Se me hincho el pecho de emoción al bajar del avión y ver a cientos de periodistas esperándome y encegueciéndome con sus flashes. Di una breve conferencia y me fui a mi casa rápido como un avión de los que piloteaba. Ma y Pa me estaban esperando con una rica cena, mi preferida: pavo con papas a la crema. Mamá lloró mucho esa noche y yo no podía soltarla de mis brazos.<br />Pasadas unas semanas me llego una carta del ejército. Tenia que presentarme en el cuartel para partir hacia la isla Tinian, la cual me habían comentado que era la mayor base aérea norteamericana y que se encontraba a seis horas de vuelo de Japón. No sabia como darle la noticia a mamá, se iba a disgustar mucho. Nos estaban separando de nuevo.<br />En la isla la vida era muy diferente a la del frente Alemán. Era un lugar soleado, con una hermosa playa, como las que se ven en las revistas y un ambiente muy relajado entre los chicos. Jugábamos beisbol todos los días, escuchábamos música a toda hora y teníamos bastante tiempo libre, salvo por las misiones de bombardeo a las ciudades japonesas. El ejército trajo a un grupo de chicas, que iban a ser nuestras enfermeras. Los muchachos se desesperaron, y comenzaron a flirtear constantemente. Me divertía mucho verlos y recordar las lecciones de ciencias naturales en el colegio, donde veíamos los rituales de apareamiento de los animales. Tom y Dutch, mis preferidos del regimiento a mi cargo, eran los peores. Se convirtieron en perros en celo, solo faltaba que orinen sobre las chicas para marcar su territorio. A mi todo eso no me llamaba la atención. Mamá solía decirme que una chica bien no es atraída mediante esos mecanismos, así que yo nunca intente coquetear con las muchachas.<br />A fines de Julio mis superiores me informan sobre una misión secreta que estaría a mi cargo. No me especificaron en que consistiría, solo me dijeron que acortaría la guerra en por lo menos seis meses, lo cual me pareció algo extraordinariamente bueno, considerando la cantidad de compañeros muertos que había por día. Debía preparar a los muchachos para esta misión única, en donde no podíamos fallar. Japón no quería rendirse. Uno de mis jefes me especifico seriamente que transmita a los muchachos que no podrían escribir mas cartas a sus familias, ni llamados telefónicos, para así asegurarnos de preservar en secreto el plan. No me anime a preguntar, pero no entendía si esa orden corría también para mi. ¿No más llamados ni cartas a mamá? No podía ser. No podían separar aun más ese lazo que nos unía con ma. Yo me había portado muy bien, había seguido las ordenes al pie de la letra, no contradecía a mi capitán y sabia muy bien guardar secretos, así que ¿por qué me hacían esto? No dije nada, no objete esta orden, pero la iba a romper. Nada era más importante que mi madre.<br />Esa misma noche, mientras los chicos bebían y trataban de conseguir acostarse con alguna de las enfermeras, me escape y la llame. Se puso muy contenta de oír mi voz. Me contó lo contenta que estaba de tenerme de hijo y que esperaba con ansias el fin de la guerra así podríamos estar cerca, muy cerca. Le advertí que no sabía cuando podría volver a llamarla, y ella me dijo que estaba bien, pero que me cuidara y que no dejara que ninguna chica fácil me tocara. Siempre se preocupó mucho por que las muchachas que me rodearan fueran educadas con buenos valores.<br />El cuatro de Agosto reuní a mis hombres para detallarles el plan. Les mostré el mapa de la ciudad que sobrevolaríamos y el punto exacto donde deberíamos actuar. Nunca había visto un blanco tan bueno en toda la guerra. Era un puente con forma de T, que unía tres ríos y que cruzaba a la ciudad por el medio. Partiríamos ni bien los primeros rayos de sol aparecieran por sobre el Pacifico. Los nervios me comían por dentro. Mientras preparaba todo minuciosamente, uno de mis chicos me hizo dar cuenta de que el avión no tenía nombre. No lo dude ni por una centésima de segundo: llevaría el nombre de mamá. ¿Qué mejor homenaje a esa increíble mujer podía hacerle yo?. Era el punto máximo de mi carrera militar y ella estaría allí de alguna forma u otra. Y así lo hice. Tome un tacho de pintura negra y dibuje las letras de su nombre sobre el plateado acero. Enola Gay seria el nombre que todos recordarían.<br />Era ya la madrugada del cinco y mis hombres se impacientaban cada vez más. El científico de la base me dio unas píldoras que deberíamos tomar si ocurría algún problema. Luego de seis minutos de haberlas tomado todo habría terminado y sin el mas mínimo sufrimiento. Cianuro dijo que contenían.<br />Salimos a la pista que estaba repleta de soldados. Todos los de la base estaban allí aplaudiéndonos y despidiéndonos. También había muchas cámaras y flashes. Parecía un estreno de Hollywood. Nos subimos al avión y un muchacho me dijo desde abajo que saludara, y mientras el viento helado del amanecer soplaba entre mis dedos, me tomaron la última fotografía antes de partir. <br />El pequeño niño que llevábamos en el vientre pesaba mucho, así es que el despegue seria la parte mas peligrosa de toda la misión. Mantuve a Enola en la pista el mayor tiempo posible. Debía ser una maniobra suave y lenta. Tome el volante despacio, con los dedos casi rozándolo y mientras lo manejaba pensaba en esas noches de amor con mamá, en su piel delicada y como mis manos rodeaban su cintura mientras la espuma nos cubría el cuerpo. Casi al final de la pista la hice volar. Me gustaba siempre hacerla esperar, hacer todo sumamente despacio, cuidando de todos los detalles.<br />Luego de dos horas de vuelo, preparamos a Little Boy para que haga su triunfal actuación. Divisamos entre las nubes el puente con forma de T y nerviosamente avisamos a la base. “El juez se fue a trabajar” era el código. <br />Como las gaviotas que se ven en la playa con los últimos rayos de sol, planeamos sobre la ciudad. Enola quería parir a ese hijo prodigo del que tanto se hablaría en el futuro. Su vientre se abrió y Little Boy salió. Era increíblemente bello y todos sabíamos que se convertiría en el orgullo de la nación. Gracias a él la guerra concluiría antes.udmihttp://www.blogger.com/profile/11090228191851575461noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-31365195.post-8105994789295942572008-11-10T19:54:00.000-02:002008-11-10T19:55:32.823-02:00AntropofagiaEra la hora del almuerzo y los gerentes ya se habían retirado a los costosos restaurantes donde comerían riquísimos manjares. Desde las once de la mañana que la imaginación atormentaba a Julio. Insistentemente lo perturbaba con imágenes de sus comidas predilectas y su estomago gruñía con tanta fuerza que le resultaba trabajoso disimular el ruido frente a los clientes.<br />El muchacho encargado de la Caja 1 se acercó a su cubículo y esgrimiendo una sonrisa, porque sabia que era casi imposible una negativa frente a su pedido, le preguntó si podía cubrirlo hasta que volviera de almorzar, ya que Pedro, el que se encargaba siempre de atender la caja en su remplazo, estaba enfermo. Julio asintió. Iba a tener que soportar una hora más sin probar bocado.<br />Al cabo de una hora de espera, que le parecieron décadas, y de una lucha con sus necesidades básicas (necesitaba usar el baño con urgencia), Julio vio llegar, con cara de sueño y felicidad al muchacho. <br />Julio se levantó rápidamente, como reaccionando a una picadura de algún insecto tropical, esos que son de hermosos colores pero que contienen venenos letales. Casi se olvida de su saco y el celular. No le importó tener que empujar a un grupo de clientes que hacían cola aprovechando sus horas de almuerzo en el pago de facturas. Fuera del banco la luz del sol arremetió contra sus pupilas y lo dejó ciego por unos instantes, pero nada le impediría llegar hasta la cantina de Don Manuel.<br />Abrió la puerta del local con tanta fuerza que el ruido hizo que todos los comensales se dieran vuelta para mirarlo. Su mesa estaba ocupada por una bella y joven señorita, que en otra ocasión habría sido victima de los encantos de Julio. Pero hoy el hambre era lo más importante.<br />Pidió lo de todos los miércoles: asado con papas fritas. Sabía que se tenía que cuidar de las grasas porque el colesterol le había salido alto, pero ni su mujer ni su médico estaban ahí para controlarlo. El plato, inusualmente, estaba tardando mucho en llegar. Se comió todos los grisines de la panera.<br />En eso ve acercarse a Josito, el mozo, con la bandeja cargadísima de cosas. Se dirigía hacia él. Apoyó el plato con las papas fritas y la botella de gaseosa. Empezó a levantar un plato gigante, que parecía ser muy pesado. Lo colocó justo en el medio de la mesa. Julio lo miró y se horrorizó. Tenía que comerlo sí o sí, pedir otro plato tardaría mucho.<br />Agarró el tenedor como con miedo y lentamente lo llevó hacia ese trozo de carne sangrienta. Temía pincharlo y que se moviera. Parecía un feto que no había terminado de desarrollarse. <br />Con los ojos entreabiertos y la mano temblorosa pinchó la carne. Podía sentir como el tenedor atravesaba la carne roja, y como esta se resistía a ser pinchada. Creyó oír un grito, pero se convenció de que era su imaginación. El tenedor llegó hasta el fondo y comenzó a sacarlo. Borbotones de sangre comenzaron a surgir de los agujeritos que habían provocado los dientes del tenedor. No podía mirar este sanguinario espectáculo, pero tampoco podía retirar su vista de él. Su estomago gruñó, pero esta vez de repulsión. <br />A los pocos segundos la sangre dejó de salir, pero el plato ya estaba inundado. Tomó el cuchillo con su mano derecha y cobrando valor cortó un pedazo de carne, uno pequeño. Con asco lo llevó hacia su boca, donde sus dientes comenzaron a masticarlo. Estaba muy fibroso. Podía sentir como cada vez que sus dientes se apretaban, la sangre salía del pedacito de carne y se escapaba por sus comisuras. Tomó un trago de Coca para poder pasar el trozo sin sentirle el gusto. Sabía extrañamente horrible, pero no podía no comerlo. Quedaría como un niño de mamá frente a todos los que se encontraban allí. <br />Decidió mezclar el sabor asqueroso del asado con el de un par de papas fritas. En eso pasó Josito y con una sonrisa perversa le preguntó que tal estaba la comida. Mintió. Dijo que muy rica, como era de costumbre.<br />Hacía unos minutos que un policía miraba la cantina desde afuera. Entró y se dirigió directo hacia el mostrador donde estaba Don Manuel. Desde donde estaba Julio parecía un interrogatorio. Solo logró escuchar algo sobre un niño que desde algunos días se encontraba perdido.<br />Le quedaba la mitad y solo tres papas para poder disimular el sangriento sabor en su boca. Para colmo la carne se había enfriado y puesto más dura y fibrosa. El Tramontina luchaba contra el pedazo de asado. Julio recordó el artículo sobre los aborígenes de Trobiand, que según la revista Selecciones, debían comer a sus padres. La palabra antropofagia resonó en su cabeza por un largo rato.udmihttp://www.blogger.com/profile/11090228191851575461noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-31365195.post-19509491236330252912008-06-29T04:16:00.001-03:002008-06-29T04:18:40.964-03:00¿como saber quien soy si aun no he despertado?Durante mi gestación, mi madre leía las obras completas de Sherlock Holmes entre cucharadas de mayonesa y helado. Muchos dicen que la música que escuchen las madres llegara al bebe. A mi me llegaban las palabras que contaban las aventuras del detective. <br />Recuerdo vagamente el ritual de ir a dormir. Me lavaba los dientes con el cepillo de los Picapiedras, me ponía un pijama, abrazaba a la manzanita y esperaba a mi papa. Recorrimos todo medio oriente con Scherezada como guía y corrimos al conejo blanco con Alicia.<br />En el living de mi casa había un biblioteca que cubría dos paredes, pero yo no advertía los placebos que descansaban sobre esos estantes.<br />A los cuatro años nació mi hermano, y mi creencia de ser el centro del mundo se desvaneció. Había nacido un opositor, que me robo la completa atención de mis padres. Tenia que hacer algo para volver a captar los ojos de los mayores. No me convencía del todo pintar paredes, ni enfermarme. La respuesta la encontré en esas dos paredes de la sala de estar. Comencé con los títulos de una colección de libros del diario Pagina 12. De a poco iba asociando letras. Esos garabatos comenzaban a cobrar sentido, o por lo menos sonidos. Aprendí a escribir mi nombre, con una E invertida entre la última L y la A; los nombres de mis padres, el de mi hermano y el de mi abuelo. Y me compraron mi primer libro: "Cocoquita, la gallinita mamita".<br />Así pasó un año, hasta que llegó el comienzo de clases. El primer día estaba asustada y sola, no conocía a ninguno de esos otros chicos y me intimidaban. Me emocionaba aprender ingles, para entender y poder cantar las canciones del beatle Paul Mc Cartney. Mi maestra de los primeros años de colegio ejerció una fuerte influencia sobre mi, y en mi temprana concepción del mundo. Nos explicaba filosofía y ecología. Nos hacia amar a Borges, sin que ninguno de nosotros supiera quien era ese viejito ciego con voz casi incomprensible. Pero a mi me gustaban las matemáticas. Mi mejor amiga era buena en lengua. Parecía como si nos hubiésemos repartido los gustos.<br />Me oponía a leer. Mis papas inventaban todo tipo de trucos para que yo leyera, pero no había caso. Hasta que descubrí la biblioteca del colegio y los cuentos de terror que había en ella. Me fascinaba asustarme con esas historias de bichos, enfermedades y muertos vivientes. Recuerdo muy bien que antes de entrar al quirófano por una peritonitis, mi madre me leyó el cuento de Edgar Alan Poe, El Corazón Delator.<br />Mi amor por los cuentos de terror continuo hasta los doce. Socorro de Elsa Bornemann era mi libro preferido. Debe de ser por efecto del cuento de la almohada de plumas que ahora tengo alergia a ellas.<br />No se bien porque se despertó en mi una inmensa pasión por todo lo que tuviera que ver con la astronomía. Devoraba así libros de Carl Sagan e Isaac Asimov, que pocas veces lograba entender. <br />Mi adolescencia fue como todas las demás adolescencias de chicos posmodernos: depresiva. Mi autor preferido era Kafka, que creaba esos ambientes en donde yo me sentía a gusto. O mejor dicho, me sentía un poco identificada con sus personajes (en su mayoría llamados K). Empecé a leer a este autor de pelo engominado y de rasgos duros, después de que mi padre me dijera que era muy chica como para comprenderlo. Por algún lado me tenía que rebelar, aunque sea mínimamente. <br />Comenzó la búsqueda de identidad de todo típico chico de dieciséis años. Leí a Garcia Marquez y sus cien años de soledad (los cuales creo que son condición necesaria para que vuelva a leer algún otro libro de él), Tolkien y su señor de los anillos, Conrad con su corazón de las tinieblas, y Lovecraft con sus cuentos místicos.<br />En el último año de colegio, un chico con el cual éramos un poco mas que amigos, me recomendó un autor argentino que creaba ambientes obscuros como los del austriaco: Roberto Arlt. No podía despegar mis ojos de sus cínicas palabras. Balder (de El Amor Brujo) paso a ser mi primer amor literario. Tan duro, sarcástico, poco sensible. Cuantas ganas tenía de ser como él.<br />Así llegue al fin de mi vida dentro del colegio, todavía sin saber quien era y hacia donde quería ir. Cuando vuelvo mi vista hacia esos años, veo a una nena sumergida en una profunda letargía, con pequeños momentos de sensaciones demasiado fuertes para alguien de tan poca edad. En ese momento de mi vida fue cuando empecé a escribir. Poemas sobre todo y frases que quedaron colgadas en papelitos. Era mi modo de autoanálisis, una especie de catarsis si se quiere. No sabia si quería seguir dormida o enfrentarme a mi, a mi realidad, a mi ser. Leía pero solo para la facultad. Cuando termino ese año de cursada me tope con un libro que cambiaria ciertas cosas en mi y mi forma de actuar frente a los sentimientos. El arte de amar de Fromm.<br />Pasaron un par lecturas sin pena ni gloria. Deje esa carrera con la cual no me identificaba. Decidí tomar el rumbo de mi vida, construirme a mí y no dejar que los demás me construyeran. Justo en ese momento conocí a Raskolnikov, mi amante. Balder pasó a ser un nene de mamá. Raskolnikov estaba tan seguro de si y de lo que creía, que no podía dejar de enamorarme de él. <br />Conocí a Pizarnik, que iba a borrar todo prejuicio que tuviera sobre la poesía, pero que me haría replantearme cosas que no quería volver a pensar. Y a Sartre, que me mostraría que ser raro no es algo malo.<br />Empecé mi vida el año pasado. Lo demás es todo un sueño.udmihttp://www.blogger.com/profile/11090228191851575461noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-31365195.post-40296359472931746442008-05-07T22:29:00.002-03:002008-05-07T22:35:48.625-03:00estoy en la carrera qe quiero, y me gusta, mucho. pero ultimamente me siento mal conmigo, es como qe no se si soy lo suficientemente buena para esto. si mi mente da para esto. <br />estoy muy confundida. con todo. <br />es un estado en el qe no se qe hacer, si salir corriendo y dejar todo todo, completamente todo. o qedarme y no se, esperar a qe se vaya sola la confusion. <br />sera qe esta carrera esta cambiando mi vision del mundo?. no quiero dejar de ser yo [en escencia], pero un cambio me vendria super bien. ojala pudiera ser mas fria, mas distante, como esas personas qe no necesitan de nadie y qe se ponen metas y solo trabajan para conseguirlas. existen realmente esas personas?, bueno no se, pero quiero ser asi.<br />sufro demasiado siendo como soy.<br />quiero dormir.udmihttp://www.blogger.com/profile/11090228191851575461noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-31365195.post-21579830316729539462008-02-28T19:30:00.002-02:002008-02-28T19:37:41.115-02:00i woke up today with the strange felling that everything had changed. am i still me?.<br />how to know if this is all a lie?, was i yesterday the smae person that i'm today?.<br />you may think that i'm paranoid, but picture this just for a second: how can you be so sure that everything that sorrounds us is real and it's not a product of our mind?.<br />should we follow the flow and don't think or question ourselves about this or should we find the truth?udmihttp://www.blogger.com/profile/11090228191851575461noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-31365195.post-85332501543443496692008-01-17T03:44:00.000-02:002008-01-17T03:46:08.011-02:00je veux te voir<object width="425" height="355"><param name="movie" value="http://www.youtube.com/v/SbHJ36prOfg&rel=1"></param><param name="wmode" value="transparent"></param><embed src="http://www.youtube.com/v/SbHJ36prOfg&rel=1" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" width="425" height="355"></embed></object>udmihttp://www.blogger.com/profile/11090228191851575461noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-31365195.post-79637057070050373502007-12-28T23:28:00.001-03:002008-12-29T14:41:03.335-02:00conejito lindo<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjFawu0xP1CgoX6zp2QjduqfYVG6vJ_ivFp1N09ZmnwD11FU1FC490bZd4sddZprrMT370kiFOwjR1yWcPPoWtVL1nr1h-Daf5n5rY1Djy-2fCutrs1tL5WFs9iEtsaF7zX9O8M/s1600-h/DSC01346.JPG"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjFawu0xP1CgoX6zp2QjduqfYVG6vJ_ivFp1N09ZmnwD11FU1FC490bZd4sddZprrMT370kiFOwjR1yWcPPoWtVL1nr1h-Daf5n5rY1Djy-2fCutrs1tL5WFs9iEtsaF7zX9O8M/s320/DSC01346.JPG" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5149216584202127618" /></a><br /><br />no tanto. ni siquiera lindo. (porque edite mi vida)udmihttp://www.blogger.com/profile/11090228191851575461noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-31365195.post-31342388086706197242007-12-21T00:12:00.000-03:002007-12-21T00:27:51.009-03:00yoko<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjnHuNJhPyvnJMnMXLBBK7KErcjDTe6wqmd-KGLPINdwImK9OFZiDRDzrgCnxhyphenhyphendhdtxyfXhiGlQVEdvduQbIBU0fLRVG5mFNuiT0NC2qyN3eQH0uwkBzkpN08CG7D6KElXmlyh/s1600-h/DSCI0081.JPG"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjnHuNJhPyvnJMnMXLBBK7KErcjDTe6wqmd-KGLPINdwImK9OFZiDRDzrgCnxhyphenhyphendhdtxyfXhiGlQVEdvduQbIBU0fLRVG5mFNuiT0NC2qyN3eQH0uwkBzkpN08CG7D6KElXmlyh/s320/DSCI0081.JPG" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5146262522875807938" /></a><br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiPc1o8aonqcy6CFfG1LocNCxaXELaTqXT6SeSms0O2bOqfev9b8t74KX-bs_a2XEslZwtLpCgkvNAFoVPE13Cg0_xMDs8YPJyoQa8D6H49mzcZIvZ-YRNL3qUEqX57UKXiR3FH/s1600-h/DSCI0084.JPG"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiPc1o8aonqcy6CFfG1LocNCxaXELaTqXT6SeSms0O2bOqfev9b8t74KX-bs_a2XEslZwtLpCgkvNAFoVPE13Cg0_xMDs8YPJyoQa8D6H49mzcZIvZ-YRNL3qUEqX57UKXiR3FH/s320/DSCI0084.JPG" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5146262527170775250" /></a><br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg4HWkLZffWhselXrKoEyIZsT2Zr_qIW-14hd5kqo1p0imVJnYxuwcq4oj8AIqoj68dNwGKunH8O-7YMRFdrkny3imgnUX8RjNzlVOKhbwZNiTyKjtbBAfVgYQckDndQBjGdknU/s1600-h/DSCI0089.JPG"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg4HWkLZffWhselXrKoEyIZsT2Zr_qIW-14hd5kqo1p0imVJnYxuwcq4oj8AIqoj68dNwGKunH8O-7YMRFdrkny3imgnUX8RjNzlVOKhbwZNiTyKjtbBAfVgYQckDndQBjGdknU/s320/DSCI0089.JPG" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5146262531465742562" /></a><br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjTKQbfi8NjiWgJk1wqtoeoW41DTLGh0PTC-6UDzjQ_nRl8u5pOMNvz4dJpaIILix3kIKrwV1mBHf_oKd0ckjOmhaHaAsHn90oz-K-kxqci82EYvYhlGaC1ojGJyU1_8fnHClcN/s1600-h/DSCI0091.JPG"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjTKQbfi8NjiWgJk1wqtoeoW41DTLGh0PTC-6UDzjQ_nRl8u5pOMNvz4dJpaIILix3kIKrwV1mBHf_oKd0ckjOmhaHaAsHn90oz-K-kxqci82EYvYhlGaC1ojGJyU1_8fnHClcN/s320/DSCI0091.JPG" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5146262535760709874" /></a>udmihttp://www.blogger.com/profile/11090228191851575461noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-31365195.post-36037863083543706112007-12-14T02:19:00.000-03:002007-12-14T02:28:13.207-03:00and then one day you find ten years have got behind youen menos de 20 dias cumplo veinte años.<br />hoy tramite el pase a mi nueva carrera, y mientras lo hacia las piernas me temblaban como si estuviese llenando formularios para casarme o algo asi. <br />y si me equivoco de nuevo?<br />me recibire a los 27 años por haber tardado tanto en making up my mind sobre lo qe quiero *ser*. y si me doy cuenta mas adelante qe no quiero ser esto?. <br />lo bueno es qe tome una posicion activa frente a mi vida, no mas de esa pasividad, esa letargia, qe condenaba mi vida. <br />tengo miedo de lo qe pueda venir y qe no este preparada praa enfrentarlo.<br />me sigo sintiendo muy chica, y tengo miedo a estas reponsabilidades.<br /><br />hanging on in quiet desperation is the english way<br />the time is gone, the song is over, thought Id something more to sayudmihttp://www.blogger.com/profile/11090228191851575461noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-31365195.post-70820159647580347102007-10-26T00:45:00.000-03:002007-10-26T00:47:35.192-03:00la lagrima me dice qe yo tampoco soy <br />la hija de un amor<br />la hija del dolor<br />la hija qe no espera<br />tu tiempo se acabo<br /><br /><br /><br /><br />yo vivo del aireudmihttp://www.blogger.com/profile/11090228191851575461noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-31365195.post-13200797811839931932007-06-17T19:03:00.000-03:002007-06-17T19:11:58.477-03:00tengo novio.udmihttp://www.blogger.com/profile/11090228191851575461noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-31365195.post-21820296927377562402007-04-29T22:28:00.000-03:002007-04-29T22:32:01.582-03:00cometa de ilusiones perdidaspara obtener una cometa de este tipo sólo es necesario haber perdido alguna ilusión. todos perdemos ilusiones, tarde o temprano, pocas o muchas. se recogen todas las ilusiones perdidas, se atan en un haz y se tiran al aire a ver qé pasa. no suele pasar nada.<br />otra ilusión perdida.<br /><br /><br />[estels fantàstics - francesc salvà]udmihttp://www.blogger.com/profile/11090228191851575461noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-31365195.post-79575068354376717612007-04-20T19:26:00.000-03:002007-04-20T19:29:00.432-03:00la vie en rose<object width="425" height="350"><param name="movie" value="http://www.youtube.com/v/DUcJWaC-2Co"></param><param name="wmode" value="transparent"></param><embed src="http://www.youtube.com/v/DUcJWaC-2Co" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" width="425" height="350"></embed></object><br /><br /><br />simplemente hermosa!udmihttp://www.blogger.com/profile/11090228191851575461noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-31365195.post-38552046558500050152007-04-17T12:08:00.000-03:002007-04-17T12:12:22.182-03:00jealous girlsla confianza es tan necesaria en una relación, pero a la vez es lo qe mas cuesta encontrar.demasiada información recibimos día a día, y es mas fácil saber con quien se relaciona la persona con la qe uno esta. por lo tanto, es mas fácil saber si lo qe dice es verdad. pero realmente qeremos saber todo, cueste lo qe cueste?, por mas de qe nos lastime saber la verdad? o preferimos vivir creyendo en la palabra del otro?.<br />en mi caso, prefiero creer en la palabra del otro [siempre qe ese otro me haya sido siempre aparentemente sincero]. pero a veces, la tentacion de saber si es verdad todo, de hacer una peqeña research es muy fuerte. aunqe a la vez me da miedo encontrar algo qe no QUIERA encontrar.<br />entonces... busco lo qe no quiero encontrar?.<br />porqe ese afan de destruir todas las relaciones, de boicotear mi vida amorosa?. tanto miedo tengo a qe me conozcan realmente?. tanto me lastimaron en el pasado qe ya no puedo ni confiar en la persona mas confiable?.<br />por ahora me estoy resistiendo a esa tentación, pero no creo qe pueda aguantar mucho mas.udmihttp://www.blogger.com/profile/11090228191851575461noreply@blogger.com1